-
Los niños deben tener al menos una persona que crea en ellos. Puede ser un consejero, un profesor, un predicador, un amigo. Puedes ser tú. Nunca se sabe cuándo un poco de amor, un poco de apoyo plantará una pequeña semilla de esperanza.
Los niños deben tener al menos una persona que crea en ellos. Puede ser un consejero, un profesor, un predicador, un amigo. Puedes ser tú. Nunca se sabe cuándo un poco de amor, un poco de apoyo plantará una pequeña semilla de esperanza.