-
Todos vivimos de la esperanza de agradar a alguien, y el placer de agradar debe ser mayor, y al fin siempre será mayor, cuando nuestros esfuerzos se ejercen como consecuencia de nuestro deber.
Todos vivimos de la esperanza de agradar a alguien, y el placer de agradar debe ser mayor, y al fin siempre será mayor, cuando nuestros esfuerzos se ejercen como consecuencia de nuestro deber.