No creo que el accidente del nacimiento convierta a las personas en hermanas y hermanos. Los hace hermanos. Les da parentesco mutuo. La hermandad y la fraternidad son condiciones que la gente tiene que trabajar. Es un asunto serio. Te comprometes, das, recibes, te mantienes firme y eres implacable... Y es una inversión. La hermandad significa que si tú estás en Birmania y yo en San Diego y estoy casada con alguien muy celoso y tú con alguien muy posesivo, si me llamas en mitad de la noche, tengo que ir.