-
Resistir y atacar a un sistema es correcto, pero resistir y atacar a su autor equivale a resistirse y atacarse a uno mismo, pues todos somos de la misma condición, hijos de un mismo Creador y, como tales, las fuerzas divinas que hay en nosotros son infinitas. Despreciar a un solo ser humano, es despreciar esos poderes divinos y, por tanto, perjudicar no sólo a ese Ser, sino con Él, al mundo entero.