-
En el libertinaje, nada es espantoso, porque todo lo que el libertinaje sugiere es también una inspiración natural; los actos más extraordinarios, más bizarros, los que más estrafalariamente parecen entrar en conflicto con toda ley, con toda institución humana... incluso los que no son espantosos, y no hay uno entre todos ellos que no pueda demostrarse dentro de los límites de la naturaleza.