-
Los grandes ecosistemas son como tapices complejos: un millón de hilos complicados, entretejidos, forman el conjunto. La naturaleza puede hacer frente a pequeños desgarros en el tejido e incluso, al cabo de un tiempo, a grandes catástrofes como inundaciones, incendios y terremotos. Lo que la naturaleza no puede soportar es el deterioro constante de su tejido por la actividad humana.