Estamos a favor de ayudar a nuestros aliados compartiendo nuestras bendiciones materiales con aquellas naciones que comparten nuestras creencias fundamentales, pero estamos en contra de repartir dinero de gobierno a gobierno, creando burocracia, cuando no socialismo, por todo el mundo. Nos propusimos ayudar a 19 países. Estamos ayudando a 107. Hemos gastado 146.000 millones de dólares. Con ese dinero, compramos un yate de 2 millones de dólares para Haile Selassie. Compramos trajes para enterradores griegos, esposas extra para funcionarios del gobierno de Kenia. Compramos mil televisores para un lugar donde no tienen electricidad.