-
Los milagros de Jesús son signos del orden correcto de las cosas. Jesús no estaba poniendo las cosas del revés, sino del derecho o, al menos, dando a sus seguidores vislumbres del derecho. Los milagros de curación, liberación, provisión y resurrección revelan que Dios, a través de Jesús, está haciendo nuevas todas las cosas, que está restaurando lo que una vez estuvo intacto.