Las personas con inteligencia deben utilizar su inteligencia, las personas con ojos deben utilizar sus ojos, las personas con capacidad de amar tienen el impulso de amar y la necesidad de amar para sentirse sanas. Las capacidades claman por ser utilizadas, y cesan su clamor sólo cuando se utilizan suficientemente. Es decir, las capacidades son necesidades y, por tanto, también son valores intrínsecos.