Como dijo Hubert Benoit, el problema no es la identificación con el ego, sino la naturaleza exclusiva de la identificación. Cuando nuestra autoidentidad se expande más allá del ego, hacia lo psíquico más profundo, y luego incluso hacia el Gusto Único y No Nacido, el ego simplemente es asumido y subsumido en una identidad mayor. Pero el ego en sí permanece como el yo funcional en el reino burdo, e incluso podría intensificarse y hacerse más poderoso, simplemente porque ahora está conectado a todo el Kosmos.