-
Está claro que Jesús consideraba a los niños preciosos, y que si los amaba tanto como para decir que los adultos deberían parecerse más a ellos, nosotros también deberíamos dedicarles más tiempo.
Está claro que Jesús consideraba a los niños preciosos, y que si los amaba tanto como para decir que los adultos deberían parecerse más a ellos, nosotros también deberíamos dedicarles más tiempo.