Dios es la luz que brilla en medio de las tinieblas, no para negar que hay tinieblas en el mundo, sino para asegurarnos que no tenemos que temer a las tinieblas porque las tinieblas siempre cederán el paso a la luz. Como dice el teólogo David Griffin, Dios es todopoderoso, su poder permite a las personas hacer frente a acontecimientos que escapan a su control y nos da la fuerza para hacer esas cosas porque Él está con nosotros.