Autores:
  • Antes de todo, solía hacer lo siguiente cuando me enfadaba: cogía todos mis sentimientos y los empujaba dentro de mí. Era como si fuera basura y la compactara para meter más. Sentía que podía seguir empujando todos mis sentimientos dentro de mis calcetines y no tendría que preocuparme por ellos. Creo que ya no lo hago.