Pero el origen de la República Americana se distingue por circunstancias peculiares. Otras naciones se han unido por el miedo y la necesidad; los gobiernos han sido generalmente el resultado de las observaciones de un solo hombre, o el fruto de intereses particulares. En la formación de nuestra constitución, se recoge la sabiduría de todas las épocas -se consulta a los legisladores de la antigüedad-, así como las opiniones y los intereses de los millones de personas afectadas. En resumen, es un imperio de la razón.