-
La nuestra es una especie de lucha diseñada, me atrevo a decir, por la Providencia para probar la paciencia, la fortaleza y la virtud de los hombres. Por lo tanto, confío en que nadie que participe en ella se dejará abatir por las dificultades ni se desalentará por las penurias. Si no puede hacer lo que desea, debe hacer lo que puede.