-
Cuando era joven, creía que la vida podía desarrollarse de forma ordenada, según mis esperanzas y expectativas. Pero ahora comprendo que el Camino serpentea como un río, siempre cambiante, siempre hacia adelante... Mis viajes me revelaron que el propio Camino crea al guerrero; que cada camino conduce a la paz, cada elección a la sabiduría. Y que la vida siempre ha estado, y siempre estará, surgiendo en el Misterio.