-
Conozco el dolor profundo. Pero también conozco la esperanza profunda. A veces, el poder de Dios se manifiesta tanto impidiendo las cosas como haciendo que sucedan. Puede que nunca sepamos por qué. Pero siempre podemos saber y confiar en el Quién.
Conozco el dolor profundo. Pero también conozco la esperanza profunda. A veces, el poder de Dios se manifiesta tanto impidiendo las cosas como haciendo que sucedan. Puede que nunca sepamos por qué. Pero siempre podemos saber y confiar en el Quién.