-
No esperes hasta el momento de la crisis. Planifica con antelación, esconde la Palabra de Dios en tu corazón y ora por adelantado por la victoria, la santidad y una vida agradable a Dios.
No esperes hasta el momento de la crisis. Planifica con antelación, esconde la Palabra de Dios en tu corazón y ora por adelantado por la victoria, la santidad y una vida agradable a Dios.