Autores:
  • Si la petición es equivocada, Dios dice: No. Si el momento es equivocado, Dios dice: Despacio. Si te equivocas, Dios dice: Crece. Pero si la petición es correcta, el momento es correcto y tú tienes razón, Dios dice: ¡Adelante!

    Bill Hybels (2012). “Too busy not to pray”, p.91, SPCK