-
Fue duro decirles a esos niños... que no iba a estar allí este año. Y sabía que los iba a extrañar. No tendría oportunidad de volver a verlos, a menos que pasaran por casa. Durante el verano, recibía muchas notas; los chicos pasaban por casa. Yo estaba arrancando malas hierbas o algo así y ellos venían y me daban un abrazo y decían: "¡Oh, no me lo puedo creer, esto es maravilloso!" y se emocionaban mucho. Fue duro no ir a la escuela. Me habría encantado volver a la escuela.