Si hubiera sido un ataque al corazón, el periódico podría haber utilizado la palabra masivo, como si una cadena montañosa se hubiera abierto en su interior, pero en su lugar utilizó la palabra de repente, una luz que se enciende en una habitación vacía. El teléfono cayó de mi hombro, un loro negro que repetía algo que había pasado, algo horrible, un domingo oscuro. Si hubiera sido terminal, habríamos podido acunarla mientras se hacía más pequeña, limpiarle la boca, despedirnos. Pero fue repentino, como de la noche a la mañana podíamos quedarnos huérfanos& el mundo se convirtió en una campana en la que nos metíamos& el tintineo todo lo que comíamos.