-
Mi suerte en la mesa de juego era variada; a veces llevaba entre cincuenta y cien dólares de ventaja, y otras tenía que pedir dinero prestado a mis compañeros de trabajo para pagar el alquiler de mi habitación y mis comidas.
Mi suerte en la mesa de juego era variada; a veces llevaba entre cincuenta y cien dólares de ventaja, y otras tenía que pedir dinero prestado a mis compañeros de trabajo para pagar el alquiler de mi habitación y mis comidas.