-
La mano de una novia se convierte en la mano de una madre. Con tanta delicadeza cuida de su precioso hijo. Bañar, vestir, alimentar, consolar: no hay mano como la de una madre. Su tierno cuidado no disminuye con el paso de los años.
La mano de una novia se convierte en la mano de una madre. Con tanta delicadeza cuida de su precioso hijo. Bañar, vestir, alimentar, consolar: no hay mano como la de una madre. Su tierno cuidado no disminuye con el paso de los años.