Thomas Merton Quotes About Devil

• El diablo no es tonto. Puede hacer que la gente sienta por el cielo lo que debería sentir por el infierno. Puede hacer que teman los medios de gracia como no temen al pecado. Y lo hace, no con luz sino con oscuridad, no con realidades sino con sombras; no con claridad y sustancia, sino con sueños y las criaturas de la psicosis. Y los hombres son tan pobres de intelecto que les bastan unos cuantos escalofríos para no descubrir nunca la verdad de nada.

  Thomas Merton

  Wisdom, Dream, Mean

• El diablo hace muchos discípulos predicando contra el pecado. Los convence de que el gran mal del pecado, induce una crisis de culpabilidad por la cual "Dios está satisfecho", y después de eso los deja pasar el resto de sus vidas meditando sobre la intensa pecaminosidad y la evidente reprobación de otros hombres.

  Thomas Merton

  Hombres, Maldad, Culpa

  Thomas Merton (2007). "Nuevas semillas de contemplación", p.92, New Directions Publishing

• Los amigos de Job aparecen en escena como consejeros y "consoladores", ofreciendo a Job los frutos de su scientia moral. Pero cuando Job insiste en que sus sufrimientos no tienen explicación y que no puede descubrir la razón de los mismos a través de los conceptos éticos convencionales, sus amigos se convierten en acusadores y maldicen a Job por pecador. Así, en lugar de consoladores, se convierten en torturadores en virtud de su propia moralidad, y al hacerlo, mientras pretenden ser defensores de Dios, actúan como instrumentos del diablo.

  Thomas Merton

  Trabajo, Ofrenda, Sufrimiento

• For the ones who are called saints by human opinion on earth may very well be devils, and their light may very well be darkness

  Thomas Merton

  Wisdom, Light, Darkness

  Thomas Merton (1998). “The Seven Storey Mountain”, p.211, Houghton Mifflin Harcourt

• En la teología del diablo, lo importante es tener toda la razón y demostrar que todos los demás están totalmente equivocados.

  Thomas Merton

  Importante, Diablo, Teología

  Thomas Merton (2007). "Nuevas semillas de contemplación", p.96, New Directions Publishing

• First, the desert is the country of madness. Second, it is the refuge of the devil, thrown out into the "wilderness of upper Egypt" to "wander in dry places." Thirst drives man mad, and the devil himself is mad with a kind of thirst for his own lost excellence--lost because he has immured himself in it and closed out everything else. So the man who wanders into the desert to be himself must take care that he does not go mad and become the servant of the one who dwells there in a sterile paradise of emptiness and rage.

  Thomas Merton

  País, Hombres, Egipto

  Thomas Merton (2011). “Thoughts In Solitude”, p.21, Macmillan

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