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La forma en que vemos las cosas hoy no tiene por qué ser la forma en que las veíamos ayer. Esto se debe a que las situaciones, nuestras relaciones con ellas y nosotros mismos hemos cambiado entretanto.
La forma en que vemos las cosas hoy no tiene por qué ser la forma en que las veíamos ayer. Esto se debe a que las situaciones, nuestras relaciones con ellas y nosotros mismos hemos cambiado entretanto.