-
Escucha a las personas que te quieren. Cree que merece la pena vivir por ellos aunque tú no lo creas. Busca los recuerdos que la depresión se lleva y proyéctalos hacia el futuro. Sé valiente; sé fuerte; toma tus pastillas. Haz ejercicio porque es bueno para ti aunque cada paso pese mil kilos. Come cuando la propia comida te dé asco. Razona contigo mismo cuando hayas perdido la razón.