-
Los malos hechos hacen malas leyes, y las personas que escriben malas leyes son, en mi opinión, más peligrosas que los compositores que celebran la sexualidad. La libertad de expresión, la libertad de pensamiento religioso y el derecho al debido proceso de compositores, intérpretes y vendedores están en peligro si el PMRC y las grandes discográficas consuman este desagradable acuerdo.