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Por Dios, no puedo adular, desafío las lenguas de otros, pero no hay hombre más valiente que vos en el amor de mi corazón. No, cumplid mi palabra; aprobadme, señor.
Por Dios, no puedo adular, desafío las lenguas de otros, pero no hay hombre más valiente que vos en el amor de mi corazón. No, cumplid mi palabra; aprobadme, señor.