-
Toda biblioteca responde a una doble necesidad, que a menudo es también una doble obsesión: la de conservar determinados objetos (libros) y la de organizarlos de determinadas maneras
Toda biblioteca responde a una doble necesidad, que a menudo es también una doble obsesión: la de conservar determinados objetos (libros) y la de organizarlos de determinadas maneras