-
Pero, tal vez, el adulador no es detectado a menudo; porque una mente honesta no es propensa a sospechar, y nadie ejerce el poder de discernimiento con mucho vigor cuando el amor propio favorece el engaño.
Pero, tal vez, el adulador no es detectado a menudo; porque una mente honesta no es propensa a sospechar, y nadie ejerce el poder de discernimiento con mucho vigor cuando el amor propio favorece el engaño.